lunes, 22 de diciembre de 2008

Triángulo de las Bermudas: tierra de nunca jamás.


La vida me está volando alrededor y casi casi no me está dando tiempo ni de agarrarla con las yemas de mis dedos.

En estas vísperas de noche buena el aire se respira diferente, la tierra no tiene la misma textura, las nubes empiezan a adquirir tonalidades distintas y yo, yo hoy ya celebro un onomástico más.

No sé qué tan egocéntrico sea decir que diciembre es mi mes favorito, no lo siento así, siento que todo se me junta este mes. Sentimientos van y vienen con el vaivén del viento.

Hay veces donde a como lloro de alegría, me río de la tristeza. A finales de año todo puede pasar: Hoy recibí la cordial visita de J, S, y L. Mis amigas de antaño, con las que aprendí a hacer lasagna. Es bonito saber que hay quien se acuerde de vos en tu cumple, hoy fue mi día. El celular no me ha parado de sonar y la ilusión tampoco.

Hoy abro la puerta de la clase de gente que no sale del status hasta que se case, y la verdad, nada me urge.

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