jueves, 30 de octubre de 2008

Debut




Juro que no fue idea mía. Soy inocente. Sólo obedecí, aunque he de admitir ya que no puedo ocultar estos ojos traviesos, que felizmente obedecí al profe LB que confió en mi, en nosotros.

Ahí, sin experiencia ni trayectoria, sin talento, solo ahí estábamos. Ahí, con motivación, con ganas, con miedo, solo ahí estábamos. Si hubiera tenido yo la mala maña de comerme las uñas, sé que lo hubiera hecho, previo a.

¿Yo, Acción retardada? Sí, para bien o para mal.
Aun no sé cómo llegamos mis 4 compañeros y yo ahí adelante, y menos entiendo el momento en que empezamos a abrir nuestras gargantas y contra cualquier pronóstico cantamos, ante apenas algo parecido a la sombra de lo que se hubiera llamado el público.


Así que cuando al fin volví a mi cabalidad, ya mis dedos no tenían contacto con ese dispositivo electrónico acústico que convierte el sonido que percibe en señal eléctrica. Ahora el micrófono estaba ahí estático, y era yo la que lo contemplaba incrédula y desconfiadamente.

Hasta el dinero, dado despectivamente, no deja el mismo sabor en nuestras manos extendidas.
Oso decir que prefiero lo que recibí, un nimio aplauso pero sincero y de buena gana.

Por lo menos puedo jactarme de que ya sé lo que se siente, y se siente muy bien.



miércoles, 29 de octubre de 2008

No hablo en notas musicales

Ayer me topé a mi amigo A, el músico A.
Tertuliándome de sus proyectos, de sus logros,
se refería a mí como 'colega'.

Automáticamente esa palabra a mi mente voló
pero no encontraba asilo para anidarse en mi cabeza.

A quien quieres engañar A, sabes que no soy músico,
que manejo solo las partituras de los ritmos del alma.


Solo soy una guitarrista frustrada, como muchos y muchas
quien no se atrevió a dejarlo todo por la música.



Despectivamente alguien una vez me llamó insana por no ser músico.

Solo soy esa a quien le puede pesar el no haberlo arriesgado todo
sin que signifique eso que pese del todo el no haberlo hecho.
Amo lo que estudio, pero siempre voy a amar el arte,

A, muchas felicidades por el éxito hasta ahora.
Estaba en mi destino no hablar en notas musicales.

Inhumanidad






No sé por qué el amor está prolongando sus vacaciones

la idea ya no parece nada divertida.

No dejó huella para encontrarle.



Ya no se ve pasar por las calles,

ni hospedarse en casas de pueblo,

no pide posada ya,
ni juega en medio de los niños de la ciudad.



Yo que caminé con él y lo vi cara a cara, siento que lo extraño.

Una gota transparente empaña mi vista de pronto

tornose negra de la tristeza y se deslizó hasta mi boca

para alojarse en el nudo que encontró en mi garganta,

nudo de pensar en que nos haya dicho adiós.



Mi caminar se ha tornado en pasos rápidos y largos.

Agacho la mirada para no majar los charcos,

y para no tener encontronazos con miradas...

...con miradas sin amor.



martes, 28 de octubre de 2008

Cuesta abajo




¿Han visto lo que cuesta escalar una colina? El empeño que hay que poner, la dedicación, la motivación, el trabajo duro! Sin embargo: Qué facil es rodar cuesta abajo!

Todo lo que sube tiene que bajar, cuanto más alto se está más duro es el golpe.

Es increíble que uno tenga que sentirse mal por haber sacado una nota óptima.

Alguien me desdibujó la sonrisa al renegar sobre las notas, ese alguien sintió que merecía más, pero yo leí entre líneas que era yo la que merecía menos. La contraparte se esforzó más, lo sé, pero NO fui yo la que me puse la nota.

Mi 100 está aquí junto a mí, velando mi insomnio, acompañándome en esta luz de pantalla, ¡¿Lo quiere ud? A mí ya me está robando la paz...ciencia.

Estado del Bombillo: Activado

Hoy pasó algo, algo que La Ruta del Viento intentó llevarse consigo en su andar: V me acaba de decir que yo hubiera tenido futuro como periodista, que las letras son lo mío, ella siempre tan acertiva.

Por dentro no sabía explicarme por qué hasta hoy no tenía un blog personal.
Quizá ese reselo de saber que puede ser leído aunque sea por mi sombra
ha inhibido el derecho a ejercer mi libertad de expresión (nivel internet) estos años.


Hoy mis dedos, comandados por un giro de 180º en mi mente,
han querido empezar a trazar una nueva ruta
han aceptado el reto de nadar en aguas profundas
y de surcar cielos implacables.

Gracias V, no lo sabes, pero hoy el aliento que inspiraron tus palabras, hizo eco en forma escrita.